El contacto con la naturaleza es una de las cosas más saludables que podemos practicar. Si quieres aprovechar las vacaciones para mejorar la salud y cargar las pilas a la vez que te diviertes con los tuyos, las vacaciones rurales son una de las mejores opciones que puedes escoger, ¿conoces todos los beneficios que aportan?

Libertad y aceptación en el medio rural

Las vacaciones rurales ofrecen muchos beneficios, entre ellos el medio, que ofrece una gran sensación de libertad y aceptación por todos los visitantes. En la naturaleza no existen las diferencias ni la presión, es un espacio de relax y en el que convivir desde los aspectos más esenciales del ser humano. Esto resulta liberador y ayuda mucho a desconectar durante los episodios de estrés.

El contacto con los medios rurales tiende a alejar a las personas de sus rutinas y problemas mucho más que las vacaciones en las ciudades grandes por lo que el descanso es más reparador y la desconexión mucho más literal. Poner una distancia mental además de física es crucial para notar los efectos positivos de tomarse unas vacaciones.

Una mente más saludable a todos los niveles

Las vacaciones rurales nos acercan a un entorno natural que modifica el funcionamiento de nuestra mente. Los paseos por el campo hacen que la atención dirigida descanse y se puedan disfrutar de otros sentidos. Esto supone unas “vacaciones” para nuestro cerebro ya que este tipo de atención está asociada a la fatiga, el estrés, y en definitiva al trabajo.

Esta ventaja es tan contundente que hoy en día se está empezando a utilizar el medio natural para tratar algunas condiciones como la hiperactividad y mejorar la concentración en personas que tienen este tipo de problemas. Para los niños esto será absolutamente beneficioso, así que las vacaciones rurales pueden ser excelentes planes familiares.

Los espacios verdes

La cercanía de los árboles y la convivencia con los espacios verdes previene las enfermedades más comunes en la sociedad urbana y aquellas que están más asociadas con la muerte prematura. Cuando tomamos unas vacaciones rurales nos estamos acercando al método preventivo más natural contra un montón de dolencias que nos podemos evitar de esta forma tan relajante y entretenida.

Las principales dolencias que se previenen con el contacto con los espacios verdes son las diabetes, también supone una disminución de la tensión arterial, la frecuencia cardíaca, el colesterol y por tanto todas aquellas enfermedades cardiovasculares. Las personas en contacto con la naturaleza parece que tienen menos partos prematuros, duermen mejor y tienen menor riesgo de muerte prematura.

La conocida terapia japonesa “baño de bosque”

Las vacaciones rurales pueden llegar a ser tan saludables como para resultar terapéuticas, o así lo ven en Japón donde practican la terapia “baño de bosque” que consiste en pasar tiempo en el bosque caminando, de pie o tumbados y en contacto con el medio natural.

El resultado es beneficioso en muchos aspectos ya que el contacto con las bacterias presentes en las áreas naturales tiene un alto beneficio en el sistema inmunitario y reduce las infamaciones.